¿Rodilla hinchada? 5 formas de tratar esta lesión
El dolor es el parámetro número uno a la hora de identificar una lesión, y casi siempre se basa en la misma lógica: si es muy intenso necesita atención; si no lo es, con el tiempo se puede quitar.
No obstante, a veces esa lógica no es muy conveniente pues puede haber lesiones “ocultas” que tardan en manifestarse. En el caso de la rodilla hinchada, el dolor puede aparecer intensamente de un momento a otro, aún cuando la lesión la has estado acarreando por varias semanas.
Además del dolor intenso, los síntomas evidentes de esta lesión son la rigidez y la hinchazón. Por obviedad, una vez que se presenta la hinchazón, es recomendable acudir con un especialista para que pueda valor la zona afectada.
Pero… ¿cuáles son las causas de esta lesión?
Básicamente esta lesión puede aparecer debido a un traumatismo, es decir, un golpe fuerte en la zona, debido a una enfermedad o incluso un trastorno no diagnosticado.
La lesión se da luego de que aparezca un exceso de líquido acumulado en la articulación de la rodilla y a sus alrededores.
Por cierto, ese líquido es muy importante para determinar la gravedad de la lesión; por eso –en algunos casos– el médico especialista puede tomar una muestra de éste para detectar infecciones, enfermedades o lesiones acumuladas.
En muchos casos, la extracción de una parte del líquido es un paso fundamental para comenzar con la rehabilitación; sin embargo –dentro de la valoración– también se puede comenzar a rehabilitar la zona para encontrar la gravedad de lesión.
A continuación, te presentamos algunos métodos que debes buscar en una clínica de rehabilitación cuando tu rodilla esté hinchada:
Resonancia magnética
La resonancia magnética ayuda mucho a valorar la rodilla, pues sirve para detectar el grado de la lesión en los tendones, los ligamentos y los tejidos blandos; características que no se pueden ver con facilitad en una radiografía.
Masajes terapéuticos
En el caso de los masajes terapéuticos, estos se pueden aplicar una vez que se haya determinado que la lesión no es de gravedad.
En ocasiones, la lesión de rodilla hinchada puede no ser de gravedad, por lo que este tratamiento es ideal para fortalecer la zona afectada.
Además, dentro de los beneficios de estos masajes se encuentra que: pueden eliminar toxinas y activar la circulación sanguínea y linfática; de esa manera, mejora el transporte de oxígeno a los tejidos.
Uso de electroterapia
A diferencia de los masajes terapéuticos, este método de rehabilitación sí está enfocado a recuperar la zona de una lesión más grave.
De hecho, se aplica en procesos donde el dolor es intenso, en inflamaciones serias, así como en atrofias y lesiones musculares.
Ultrasonido
El uso de ultrasonido trae muchos beneficios y su aplicación es bastante sencilla, y en el caso de la rodilla hinchada, este método sirve para aliviar la inflamación a través de la transferencia de ondas mecánicas.
Uso de parafina
La parafina es una sustancia parecida a la cera que sirve para tratar algunos síntomas de las lesiones. Muchos fisioterapeutas utilizan parafinadores cuando el paciente presenta rigidez muscular e inflamación, por lo que es ideal para la rodilla hinchada.
Ahora que conoces las cinco formas de tratar esta lesión, es importante que busques las mejores clínicas de fisioterapia y rehabilitación en la Ciudad de México.
En TherapyCord –por ejemplo– contamos con estos métodos para poder valorar cualquier tipo de lesión, incluso la rodilla hinchada. Consulta con uno de nuestros especialistas.